
Personas refugiadas: un recordatorio de esperanza en las olimpiadas
En sus rostros aún hay espacio para sonrisas, posan con orgullo y la mirada fija. Tienen caras diversas (algunas con cicatrices). 29 fotografías invitan a conocer la identidad e historia de personas refugiadas en el perfil oficial del Equipo Olímpico de Refugiados creado por el Comité Olímpico Internacional (COI) en Instagram. Ya no huyen, ahora compiten en el evento deportivo internacional más importante del mundo; lo hacen en medio de la pandemia por COVID-19. Sus cuerpos resisten para cumplir sueños, enfrentaron el desplazamiento forzado y duros entrenamientos. De acuerdo con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), las y los refugiados “son personas que huyen de conflictos armados o persecución”.
En el sitio web oficial de las olimpiadas, se explica que el objetivo de incluir a personas refugiadas es que las y los atletas sean símbolo de esperanza y solidaridad para las personas que se encuentran en una situación similar, “llamarán la atención mundial sobre la magnitud de la crisis de los refugiados”, expresan.
Las 29 personas son originarias de Afganistán, Siria, Irak, Sudán del Sur, Sudán, Camerún, Irán, Congo, Venezuela, Eritrea y República Democrática del Congo. Sus nuevos hogares están en Trinidad y Tobago, Austria, Bélgica, Alemania, Brasil, Canadá, Francia, Israel, Kenia, Portugal, Países Bajos, Suiza y Reino Unido.
De Venezuela a Japón: el triste viaje de Eldric Sella

Eldric Sella, originario de Caracas, Venezuela, se convirtió en el primer refugiado latinoamericano que participó en el equipo de COI. En su blog personal se describe como una persona soñadora, de niño quería ser bombero, después cantante de reguetón. El último de sus sueños fue ser boxeador; llegó a los Juegos Olímpicos de Tokio.
“Desde niño siempre fui muy soñador, crecí con la creencia de que todo es posible y de que cualquier cosa que yo quisiera hacer lo podría conseguir”
Eldric Sella
Eldric vivía en el barrio ’23 de Enero’, decidió no ir a la universidad para concentrarse en el deporte. “El incremento de la violencia y la crisis humanitaria hicieron que él y su novia dejaran su país para estar en un lugar más seguro”, según el COI. Lamentablemente el boxeador de 24 años perdió en su enfrentamiento contra el dominicano Euri Cedeño. Actualmente está teniendo problemas para regresar a su país de acogida, Trinidad y Tobago.
Primera participación de personas refugiadas
Fue en los Juegos Olímpicos de Río 2016 cuando se presentó por primera vez al Equipo Olímpico de Refugiados. Las y los atletas que participaron en esa ocasión son provenientes de Siria, Sudan del Sur, República Democrática del Congo y Etiopia.
International Rescue Committe (IRC) informó el 22 de julio en su sitio web que la cifra de participantes casi se triplicó, pasó de 10 integrantes en 2016 a 29 en este año. También que el verano de 2015, tras el desplazamiento de 65 millones de personas por conflictos bélicos o desastres naturales, el Comité Olímpico Internacional creó el Fondo de Emergencias para Refugiados y se destinaron $1.9 millones de dólares a agencias internacionales para apoyar e integrar en el deporte a personas desplazadas.